“Eficacia, eficiencia y calidad en lo profesional. Respeto y dedicación en lo personal. Trabajar desde la base, desde la raíz del problema“, así responde Manuel Rodríguez, director del Colegio San José Campillos, cuando se le pregunta por el reto diario al que se enfrenta el profesorado en este centro con más de 60 años de actividad. Otras de las claves del sistema educativo, que destaca su director, es mejorar el autoestima del alumno “Cuando los resultados académicos afloran y son buenos, para muchos esto es un subidón de autoestima. Palabra mágica ésta de autoestima, con ella todo puede cambiar en la vida de un adolescente“, afirma Rodríguez.
- Díganos en pocas palabras cuál es la esencia del Colegio San José de Campillos.
El lema del Colegio es: “Colegio San José de Campillos, donde el saber ocupa lugar”. Nos dedicamos plenamente a comunicar enseñanzas para que nuestro alumnado ame el conocimiento y sepa que sólo esto será el mejor camino para afrontar el futuro en su vida personal y laboral. Creemos que fomentar en el alumno valores, conocimiento y disciplina, es fundamental para hacer de ellos mejores mujeres y hombres.
- En otras entrevistas ha comentado que no hay perfil de alumno como tal, pero en reglas generales, ¿cómo es el alumno que llega a Campillos?
Nuestro alumnado es aquel que ha perdido el norte. Bien en lo conductual bien en lo académico. Nosotros tenemos la experiencia y los métodos para cambiarlo y si éste se deja llevar de la mano, no tardará mucho en adquirir dos premisas que le ayudarán: constancia y disciplina, pero como ya he dicho antes es muy importante la colaboración del alumnado y por su puesto de la familia, que deberá aportar al colegio todos los datos académicos y conductuales para así trabajar mejor con el alumno.
- El colegio San José de Campillos da solución al fracaso escolar con su disciplina diaria en nada parecida a otra, ¿siempre se consigue?
No seamos ingenuos. En educación no todos tenemos las mismas capacidades para aprender. Y no hay fórmulas mágicas para transmitir el conocimiento y que este sea de inmediato asimilado por todos por igual. Tenemos unas premisas que desde el principio inculcamos: trabajo diario, y después del trabajo diario, más trabajo. El alumno ha de ser consciente que sólo a través de su esfuerzo y constancia conseguirá obtener buenos resultados.
- ¿Cuál es el reto diario al que se enfrenta el profesorado en el Colegio San José de Campillos?
Eficacia, eficiencia y calidad en lo profesional. Respeto y dedicación en lo personal. Trabajar desde la base, desde la raíz del problema.
- La metodología del centro parte de una jornada de estudio de casi 10 horas diarias, 6 de clases, con un refuerzo de 3 horas y media de estudio, ¿cómo de efectivas resultan las tardes de estudio y refuerzo?
Sabemos que cuando el alumno se habitúa al día a día, los resultados son favorables. Es verdad que no todos necesitan el mismo tiempo para realizar las tareas diarias, así que cuando el educador comprueba que el alumno ha aprovechado el tiempo y ha cumplido con lo que se le ha pedido en las clases de por las mañanas, éste le permite actividades de ocio en esas horas de estudio, como actividades deportivas, lectura de revistas o libros recomendados. En muchos casos estas horas de los estudios de por la tarde, son para reforzar o apoyar a aquel alumno que lo necesite, recibiendo clases personalizadas impartidas por los mismos profesores del claustro.
- La norma es que aquel que no apruebe las evaluación semanal no puede salir el fin de semanal…¿existe alguna excepción?
Sólo en los cursos superiores, bachillerato, el alumno que haya obtenido malas calificaciones semanales, si el padre lo permite, podrá marcharse a su casa. Son alumnos, que por su edad, resulta más complicado alejarles de su vida personal, así que si la familia se compromete a supervisar el trabajo de su hijo, nosotros no ponemos objeción a que se marchen, nos parece que cuanto más contacto con la familia y su entorno tengan mejor.
- El perfil del menor con el que trabajamos ha cambiado, pero ¿a qué se ha debido el cambio y cómo ha sido? ¿cree que los medios de comunicación y el excesivo uso de las redes sociales ha afectado en la educación de los menores?
Ir contra la tecnología, es ir contra la realidad. Necesitamos, o mejor dicho estamos obligados a adaptarnos a ella. No es tarea fácil. Hoy hay más relación social en las redes sociales que en el vis a vis. El tiempo que un adolescente le puede dedicar hoy en día a los aparatos tecnológicos (móviles, consolas, ordenadores, tablets…) y a las redes sociales (facebook, twiter, whatsapp…) puede ser infinito. Esta comunicación excesiva, con tantos datos, y tanta variedad de temas, está creando una adicción que en muchos casos los perturba y distrae de sus obligaciones diarias ¿Qué podemos hacer ante este problema? lo primero retirarles las herramientas para ello, aunque dependiendo de los resultados conductuales y académicos premiarles con su uso durante un tiempo establecido. No permitir estas herramientas nos dará más tiempo para dedicar al estudio, y el premiarlos, provocará mejores resultados. Con esto no ganamos nosotros, ganan ellos.
- Además de transmitir conocimientos, en Campillos se trabaja para enseñar normas, valores y actitudes de manera que el alumnado cambie su personalidad a una más sana, ¿se han dado muchos casos en los que se cambia la forma de actuar ante la vida pero sigue sin la preocupación por la formación académica?
En la mayoría de las veces son las conductas lo que lleva al fracaso escolar. Cuando la actitud y la aptitud del alumnado cambia, la situación académica no tarda e hacerlo. Al principio del curso escolar nos preocupamos más por el bienestar personal que por el académico. Ganándote a la persona, te estás ganando al estudiante. Cuando los resultados académicos afloran y son buenos, para muchos esto es un subidón de autoestima. Palabra mágica ésta de autoestima, con ella todo puede cambiar en la vida de un adolescente. Muchos de ellos llegan a nuestro centro totalmente hundidos tanto en lo personal como en lo académico, y cuando ven que las cosas cambian, que tienen solución, esto provoca en ellos un estímulo positivo que los anima a seguir y a tomar un nuevo camino.
- El cambio en el alumnado, una vez sale del colegio, es evidente. Pero, ¿cuánto tiempo es necesario para que los jóvenes modifiquen su actitud tanto en lo personal como en la parte educativa?
En esto no hay tiempos ni intensidades. Cada alumno/a es un mundo. Cada persona es un ser peculiar al que hay que trasmitirle en la transversalidad de las asignaturas y del propio internado, valores que él sepa entender, asimilar y que los haga suyos. En unos, esto es rápido y contundente, en otros, los menos, se tarda, o incluso podemos fracasar. Es difícil educar en valores cuando la sociedad los ha rechazado, cuando en la actualidad lo que prima, lo que prevalece es lo fácil, lo rápido, sin pensar que para conseguirlo has dejado atrás muchas cosas y a muchas personas, que tan sólo pensaban en ayudarte.